Citi anunció su Estrategia de Progreso Sostenible 2025 para contribuir a acelerar la transición hacia una economía de bajo carbono. Esta nueva estrategia incluye una Meta Financiera Ambiental de u$s 250 mil millones, destinada a financiar y facilitar soluciones climáticas globalmente. La iniciativa se suma a la meta anterior de Citi, de USD 100 mil millones, anunciada en 2015 y completada el año pasado, más de cuatro años antes del plazo previsto.
“Si hay una lección que aprender de la pandemia de COVID-19 es que nuestra salud y resiliencia económica y física, nuestro medioambiente y nuestra estabilidad social se encuentran íntimamente relacionados,” comentó Michael Corbat, CEO de Citi. “El tema Medioambiental, Social y de Gobierno Corporativo es prioritario y central en la respuesta de Citi a esta crisis sanitaria, y está más presente que nunca en conversaciones con clientes y asociados. Con nuestra meta de USD 250 mil millones, nos proponemos ser un banco líder en impulsar la transición a una economía de bajo carbono, la cual anticipamos que se acelerará, conforme todo tipo de empresas evolucionan hacia un futuro más sostenible.”
Esta nueva estrategia, integrada en el Marco de Política Ambiental y Social de Citi, se enfocará en tres áreas clave en los próximos cinco años:
- Transición a economía de bajo carbono: Citi tiene como objetivo financiar y facilitar un monto adicional de USD 250 mil millones en soluciones de baja emisión de carbono, además de los USD 164 mil millones que el banco contabilizó en su Meta Financiera Ambiental de USD 100 mil millones (2014-2019). Esta nueva meta incluye financiación y facilitación de actividades en energía renovable, tecnología limpia, calidad y conservación del agua, transporte sostenible, edificios ecológicos, eficiencia energética, economía circular, y agricultura y uso sostenible de la tierra. Citi continuará desarrollando estructuras de financiación innovadoras y buscando oportunidades para ampliar la escala del impacto positivo en estas áreas, además de apoyar a clientes en todos los sectores en su transición a modelos bajos en carbono.
- Riesgo climático: Medir, administrar y reducir el riesgo climático y el impacto del portafolio de clientes de Citi es un aspecto clave de la transición a bajo carbono. Citi ha sido líder en la evaluación y divulgación climática de conformidad con las Recomendaciones del Task Force on Climate-related Financial Disclosures (TCFD) al publicar su primer informe TCFD en 2018. Citi probará asimismo la resiliencia de sus carteras de préstamo ante riesgos de transición y riesgos físicos relacionados con el cambio climático, y continuará realizando divulgaciones alineadas con TCFD. El banco global comenzará a medir el impacto climático de sus propios portafolios y su alineación potencial con los escenarios de calentamiento de 1.5 y 2 grados centígrados. Citi también se incorpora al Partnership for Carbon Accounting Financials (PCAF), un marco global para que entidades financieras midan y divulguen las emisiones de sus portafolios de préstamos y creen una norma global de contabilidad del carbon para entidades financieras. Estos diversos esfuerzos informarán la forma en que Citi analiza, interactúa y colabora con nuestros clientes en el futuro.
- Operaciones Sostenibles: Esta estrategia incluye objetivos de huella operativa de cuarta generación centrados en las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI), energía, agua, reducción de residuos y soluciones de construcción sostenibles. Desde 2005, hemos reducido 3600 GWh de consumo energético y evitado 2.4 millones de MTCO2e, lo que equivale a las emisiones de GEI de más de medio millón de automóviles en la carretera durante un año (equivalencia proporcionada por la calculadora de la EPA). Si bien la ciencia climática requiere que las emisiones globales de CO2 se reduzcan en un 45% para 2030, Citi está acelerando los plazos, con un objetivo de reducción del 45% en las emisiones de CO2 para 2025. Citi espera cumplir su objetivo de obtener electricidad 100% renovable para sus instalaciones en todo el mundo antes finales de 2020. En abril, Citi recibió la certificación LEED Platinum para su sede mundial en Nueva York, lo que representa un hito importante en sus operaciones sostenibles.
Citi ha señalado su compromiso con hacer la transición a una economía sostenible de bajo carbono como el primer signatario principal basado en EE.UU. de los Principios para la Banca Responsable. En abril de este año, Citi publicó su Informe Ambiental, Social y de Gobierno Corporativo (Environmental, Social and Governance, ESG) 2019, en el cual detalló su desempeño en una serie de áreas ESG prioritarias. Asimismo, Citi recientemente fue nombrado en el segundo puesto del ranking de 3BL Media de los 100 Mejores Ciudadanos Corporativos sobre la base de la transparencia y el desempeño del banco en el área ESG.
“Estamos presenciando una verdadera integración de la sostenibilidad en nuestros negocios con la formación de equipos adicionales centrados en la sostenibilidad y en cuestiones ESG, y un mayor entusiasmo y defensa y promoción en todo Citi,” señaló Val Smith, Chief Sustainability Officer de Citi. “Nuestra nueva estrategia unifica estos esfuerzos al aumentar nuestro compromiso con las finanzas ambientales, impulsando nuestro trabajo hacia adelante en análisis de riesgo climático y divulgación, y al continuar minimizando los impactos de la huella ambiental de nuestra propia compañía.”
Desde que se desató la pandemia global de COVID-19, Citi continúa profundizando sus esfuerzos Ambientales, Sociales y de Gobierno corporativo en respuesta a la demanda de clientes y el mercado. En semanas recientes, Citi emitió su segundo bono verde emblemático, el primer bono en USD COVID-19 de Asia, actuó como suscriptor único para la primera Compañía de Adquisición con Propósito Específico (Special Purpose Acquisition Company, SPAC) relacionado con temas ESG de la historia, mejoró sus políticas de combustibles fósiles, y ha formulado nuevas unidades de negocio globales centradas en la sostenibilidad.
En medio de esta pandemia global, Citi mantiene su compromiso de apoyar a los clientes y aliados de la comunidad para ayudar a impulsar un impacto social y ambiental positivo en todo el mundo. Citi y la Fundación Citi han comprometido más de USD 100 millones a la fecha en apoyo a esfuerzos de asistencia comunitaria relacionados con COVID-19 globalmente. Citi continúa tomando medidas proactivas para preservar el bienestar de los empleados globalmente, incluso asignaciones de compensación especial a 75.000 colegas, para contribuir a aliviar la carga financiera de esta situación. Citi también está ofreciendo asistencia a clientes impactados a través de diferimientos de pagos de tarjetas de crédito, la exención de cargos, programas de facilidades de pago y apoyo adicional para pequeñas empresas.