El Gobierno nacional lanzó el Plan de Promoción de la Producción de Gas con el que pondrá en marcha un nuevo esquema de oferta y demanda en los próximos cuatro años, y con el que buscará sustituir importaciones por alrededor de u$s 5.629 millones e impulsar inversiones por al menos otros u$s5.000 millones por parte del sector privado.
El nuevo esquema que presentaron esta tarde el presidente Alberto Fernández y el ministro de Economía, Martín Guzmán, desde la formación neuquina de Vaca Muerta, prevé un costo fiscal total de u$s 5.062 millones hasta el 2024, con un ahorro fiscal de u$s 2.574 millones, y un incremento en la recaudación proyectado de u$s 2.525 millones.
El anuncio se realizó desde una de las instalaciones del área Loma Campana que opera YPF en Vaca Muerta, en la cuenca neuquina, y busca promover las inversiones y el incremento de producción en todas las cuencas gasíferas con participación equitativa de todas las regiones.
Ese desarrollo del sector gasífero, según las estimaciones oficiales, permitirá contar a lo largo del plan con inversiones por US$ 5.000 millones por parte de las empresas productoras, de las cuales u$s 1.800 millones correrían por cuenta de YPF.
En el acto, como empresa anfitriona y principal actor del sector, también estuvieron presentes el presidente de YPF, Guillermo Nielsen, y el CE0 de la compañía, Sergio Affronti.
En líneas generales el programa busca incentivar la inversión y la producción de gas como herramienta para detener el actual sendero de declinación creciente de la producción, para satisfacer la demanda interna, sustituir importaciones de GNL ahorrando divisas y bajando el costo fiscal, potenciar el empleo y el desarrollo en las las pymes y empresas regionales.
En ese sentido, el ministro Guzmán, -cuya cartera tiene a su cargo desde agosto la política energética-, explicó que el nuevo programa de incentivo a la producción de gas «va a permitir una menor dependencia de las importaciones, aportar divisas y contribuir a la estabilidad cambiaria».
«Este es un plan que define reglas de juego claras, que van a potenciar la inversión, la producción, y la generación de empleo, fruto de un proceso de articulación entre el sector público y privado», dijo Guzmán al referirse al plan que se analizó durante los últimos seis meses con las petroleras y las provincias.
El programa también «va a generar mejores condiciones para la competitividad y ayudará a todas las actividades en el sector privado, ayudará a la inversión y la generación de empleo, un paso más en el proceso de ir ordenando la economía argentina y que en la pandemia enfrentó tensiones mayores», agregó.
De esta manera se busca satisfacer la demanda de todos los segmentos de consumo, es decir el residencial, el industrial y el de las generadoras de electricidad, ante una tendencia decreciente de la producción.
La propuesta permitirá sustituir importaciones de Gas Natural Licuado (GNL) por más de 18.000 millones de metros cúbicos (m3) de gas y el consumo de combustibles líquidos, y contribuirá también con el equilibrio de la balanza energética para tornarla superavitaria a los objetivos fiscales del Gobierno, destacó el informe oficial.