.Los galpones ubicados en las inmediaciones de la avenida Mario Bravo fueron tomados para desarrollar un negocio ilegal: Moler y vender envases de agroquímicos sin ningún control.

Investigan si el destino final era hacer tanques de agua, cañerías, mesas, sillas, juguetes, vasos u otros elementos de uso humano o animal que están prohibidos por ley.

 Los vecinos cercanos a la vieja Cantera Rizzo empezaron a presentar algunos trastornos en la piel y enrojecimiento en los ojos. Muchos se atendieron en guardias, otros se encargaron de hacerlo saber, hasta que empleados municipales de Defensa Civil decidieron verificar lo sucedido. Así las autoridades descubrieron una planta ilegal de reciclaje, sin ningún tipo de control fitosanitario, con centenares de bidones utilizados para agroquímicos, fertilizantes y pesticidas.

Lo más grave que arrojó la investigación desarrollada por la policía ambiental y que fue recogida por la fiscalía de Delitos Culposos y Medio Ambiente fue que el plástico picado era vendido a distintas fábricas para realizar juguetes, artículos de bazar e incluso caños para agua.

Dos hombres responsables del emprendimiento quedaron a disposición del fiscal Rodolfo Moure por infracción a la Ley de Residuos Peligrosos, al tiempo que tanto el depósito de bidones como el galpón en el que estaban las máquinas quedaron clausurados.

La Asociación CampoLimpio, quien se encarga de recuperar los envases vacíos de fitosanitarios a través del sistema de gestión ambiental en el marco de la ley 27.279, se puso a disposición de las autoridades en todo momento y fue la encargada de la logística de todos los envases incautados en el operativo.

Vale decir que el tratamiento de esos plásticos debe hacerse en cámaras pirolíticas que tienen temperaturas elevadísimas para que dichos plásticos pierdan cualquier efecto contaminante. Es responsabilidad de los productores llevar los bidones vacíos de fitosanitarios a los Centros de Almacenamiento Transitorio (CAT) de CampoLimpio habilitados para tal fin lo que garantiza un destino seguro del plástico.

La Policía Ecológica del Ministerio de Seguridad de la Provincia de Buenos Aires en el marco de una investigación conducida por la Fiscalía Temática de Medio Ambiente Nro. 11 de Mar del Plata y con la intervención del Fiscal Rodolfo Moure llevaron a cabo el operativo, durante el cual se secuestraron elementos para determinar a quien se vendía y que hacían con los plásticos molidos y si el destino final era hacer tanques de agua, cañerías, mesas, sillas, juguetes, vasos u otros elementos de uso humano o animal.

La Fiscalía y la Policía Ecológica contaron con la colaboración para el procedimiento de personal del Ministerio de Ambiente de la Provincia de Buenos Aires, del Ministerio de Desarrollo Agrario, de SENASA, y por parte de la municipalidad participo Obras Sanitarias quienes inspeccionaron y muestrearon los vertidos, Dirección de Residuos e Inspección General, Defensa Civil Municipal quien coordinó la tarea multidisciplinaria y realizó medidas de seguridad en prevención de la vía pública.