El economista Emmanuel Álvarez Agis advirtió que el mayor ajuste que está aplicando el gobierno de Javier Milei “lo está pagando el sector de la construcción, ya que la inversión en obra pública cayó hasta 90 por ciento”.
“El gasto en obra pública cayó casi a cero”, señaló, y dijo que además de la construcción, el “ajuste lo están pagando los jubilados”, al exponer en la Convención de la Cámara Argentina de la Construcción (CAMARCO).
“La obra pública y la infraestructura se han llevado la peor parte”, dijo Alvarez Agis, y consideró que dos tercios de la obra pública requiere de la inversión del Estado porque el “sistema financiero argentino es chiquito y de corto plazo”.
Dijo que los banqueros argentinos “no son malos, son iguales de avaros que el resto, pero acá hay inflación”.
El economista sostuvo que Milei está “montando un argumento político para resolver el problema de que no tiene donde ajustar, por lo que la obra pública y la infraestructura se han llevado la peor parte. El gasto en obra pública está cayendo al 80 o 90 por ciento, está prácticamente en cero”.
Consideró que el gobierno de Milei está en una transición que apunta a “lograr inversiones externas que permitan reactivar el crédito y la confianza, algo muy parecido a lo que sucedió en los inicios de la Convertibilidad en 1992”.
“La obra pública y la infraestructura se han llevado la peor parte”, dijo Alvarez Agis, y consideró que dos tercios de la obra pública requiere de la inversión del Estado porque el “sistema financiero argentino es chiquito y de corto plazo”.
Dijo que los banqueros argentinos “no son malos, son iguales de avaros que el resto, pero acá hay inflación”.
El economista sostuvo que Milei está “montando un argumento político para resolver el problema de que no tiene donde ajustar, por lo que la obra pública y la infraestructura se han llevado la peor parte. El gasto en obra pública está cayendo al 80 o 90 por ciento, está prácticamente en cero”.
Consideró que el gobierno de Milei está en una transición que apunta a “lograr inversiones externas que permitan reactivar el crédito y la confianza, algo muy parecido a lo que sucedió en los inicios de la Convertibilidad en 1992”.
El director de PxQ Consultora, quien estuvo a cargo de la apertura de la Convención Anual de la Cámara Argentina de la Construcción (Camarco), sostuvo que “sin embargo, esta alternativa enfrenta la dificultad del cepo cambiario, un factor que frena las inversiones”.
“Ese problema, en la década del ´90, se atenuó con la llegada de dólares de las privatizaciones de las empresas del Estado, donde había varios negocios a desarrollar a futuro, algo que en este marco actual no es posible”, añadió.
El también exsubsecretario de Programación Macroeconómica entre 2011 y 2013 y exdirector por parte del Estado Nacional en Pampa Energía, Banco Macro, Edenor y Transener, consideró que este es un “régimen de transición” y aseveró que “por ese motivo apuesta todo al Régimen de Incentivo a las Grandes Inversiones (RIGI)”.
“El mensaje de esta Administración es que el cepo sólo se va a abrir cuando lleguen las inversiones, pero los inversores contestan que sólo van a invertir cuando no exista esa traba y puedan girar sus utilidades al exterior, lo que crea un círculo vicioso en el cual ninguna de las dos partes se anima a dar el primer paso”, acotó.
El economista resaltó que “este modelo, sin inversiones externas, no va a progresar” y por ese motivo estimó que “todas las ayudas del FMI u otros organismos de crédito serán inútiles, porque ya no queda más margen para seguir ajustando”.
“Argentina tiene el problema del financiamiento interno, porque tiene un sistema financiero chico que sólo planea inversiones de corto plazo y alta rentabilidad que no generan puestos de trabajo”, agregó.
Álvarez Agis puntualizó que “el blanqueo de capitales también marcha en ese sentido, pero es un camino más complicado que involucra a otros actores”.
Con relación al sector de la construcción, Álvarez Agis dijo que “para 2024, luego de que el Gobierno aceptara terminar las obras públicas en marcha, la inversión proyectada es de 1,6 puntos del PBI”, aunque aclaró que “el control de esos finales de obras siempre ofrecen dificultades y observaciones para su liquidación, por lo cual estimamos que la inversión real no superará el 0,5% del PBI, cuando en 2015 llegó a estar en 2,7% y en 2023 en casi 2 puntos”.
“Además, el sector de la Construcción atraviesa un severo proceso de inflación en dólares, lo que impulsa los costos a niveles muy superiores a las posibilidades de los salarios, un factor que frena con fuerza la actividad”, agregó.
“El margen para el ajuste parece haber llegado a su fin, porque ya está empezando a mostrar consecuencias negativas como la caída del empleo y de la recaudación, dos hechos que atentan directamente contra cualquier plan de crecimiento”, indicó Álvarez Agis.
Alvarez Agis es socio fundador de PxQ Consultora y fue viceministro de Economía entre 2013 y 2015, subsecretario de Programación Macroeconómica entre 2011 y 2013 y director por parte del Estado Nacional en Pampa Energía, Banco Macro, Edenor y Transener.
“Ese problema, en la década del ´90, se atenuó con la llegada de dólares de las privatizaciones de las empresas del Estado, donde había varios negocios a desarrollar a futuro, algo que en este marco actual no es posible”, añadió.
El también exsubsecretario de Programación Macroeconómica entre 2011 y 2013 y exdirector por parte del Estado Nacional en Pampa Energía, Banco Macro, Edenor y Transener, consideró que este es un “régimen de transición” y aseveró que “por ese motivo apuesta todo al Régimen de Incentivo a las Grandes Inversiones (RIGI)”.
“El mensaje de esta Administración es que el cepo sólo se va a abrir cuando lleguen las inversiones, pero los inversores contestan que sólo van a invertir cuando no exista esa traba y puedan girar sus utilidades al exterior, lo que crea un círculo vicioso en el cual ninguna de las dos partes se anima a dar el primer paso”, acotó.
El economista resaltó que “este modelo, sin inversiones externas, no va a progresar” y por ese motivo estimó que “todas las ayudas del FMI u otros organismos de crédito serán inútiles, porque ya no queda más margen para seguir ajustando”.
“Argentina tiene el problema del financiamiento interno, porque tiene un sistema financiero chico que sólo planea inversiones de corto plazo y alta rentabilidad que no generan puestos de trabajo”, agregó.
Álvarez Agis puntualizó que “el blanqueo de capitales también marcha en ese sentido, pero es un camino más complicado que involucra a otros actores”.
Con relación al sector de la construcción, Álvarez Agis dijo que “para 2024, luego de que el Gobierno aceptara terminar las obras públicas en marcha, la inversión proyectada es de 1,6 puntos del PBI”, aunque aclaró que “el control de esos finales de obras siempre ofrecen dificultades y observaciones para su liquidación, por lo cual estimamos que la inversión real no superará el 0,5% del PBI, cuando en 2015 llegó a estar en 2,7% y en 2023 en casi 2 puntos”.
“Además, el sector de la Construcción atraviesa un severo proceso de inflación en dólares, lo que impulsa los costos a niveles muy superiores a las posibilidades de los salarios, un factor que frena con fuerza la actividad”, agregó.
“El margen para el ajuste parece haber llegado a su fin, porque ya está empezando a mostrar consecuencias negativas como la caída del empleo y de la recaudación, dos hechos que atentan directamente contra cualquier plan de crecimiento”, indicó Álvarez Agis.
Alvarez Agis es socio fundador de PxQ Consultora y fue viceministro de Economía entre 2013 y 2015, subsecretario de Programación Macroeconómica entre 2011 y 2013 y director por parte del Estado Nacional en Pampa Energía, Banco Macro, Edenor y Transener.