La compañía estadounidense United Airlines se comprometió a reducir la sobreventa de vuelos y ofrecer hasta 10.000 dólares a los pasajeros que cedan voluntariamente su asiento cuando el avión está lleno.
Estas medidas forman parte de una serie de 10 acciones adoptadas por la aerolínea estadounidense al término de una auditoria interna sobre la expulsión por la fuerza de un pasajero en un vuelo doméstico el 9 de abril.
United, cuyo manejo del incidente suscitó una ola de indignación, elevará a 10.000 dólares el monto que un pasajero puede percibir en compensación por su asiento en un vuelo sobrevendido. Este monto ascendía a 1.350 dólares hasta ahora.
De este modo, la aerolínea se alinea con su rival Delta Air Lines, que adoptó una medida similar el 17 de abril, mientras que American Airlines decidió que no será más posible obligar a un pasajero a ceder su asiento.
En medio de las fuertes críticas a United, la empresa Southwest Airlines anunció que dejará de sobrevender vuelos. Southwest, la cuarta aerolínea estadounidense por tráfico de pasajeros, registró el mayor número de sobreventas de vuelos entre las empresas del país el año pasado, al haber dejado en tierra a un total de 15.000 pasajeros, o casi 9,9 personas por cada 100.000 clientes, lo que incluso representaba cifras menores frente al 2015.
La aerolínea pagó un promedio de 874 dólares por cada pasajero al que dejó fuera de un vuelo, de acuerdo a datos del Departamento de Transporte de Estados Unidos.