Ubicado en el bullicioso barrio de Palermo, abrió sus puertas Tetuán Brasero Marroquí, una apuesta más que singular de la mano de los primos Nicolás Wolowelski y Juan Martin Migueres, impulsores de emprendimientos cómo Benaim.
Desde la fachada del local la cultura marroquí se despliega en sus paredes exteriores con un mural realizado por el artista Cabaio Spirito, donde las formas y los colores se fusionan invitando a adentrarse en una experiencia distinta. Una barra recibe a los visitantes para agasajarlos con diversas opciones de cocktails de autor y 12 variedades de cerveza tirada con Happy Hour todos los días de 18:00 a 20:00hs. Del techo cuelgan un centenar de stencils realizados por Cabaio Spirito inspirado en detalles que recuerdan a la ciudad de Tetuán, de la cual lleva el nombre este moderno gastropub rodeado de paredes tapizadas con retazos de arpillera.
En el centro del salón una gran mesa de madera recorre el largo de Tetuán invitando a grupos numerosos a tomar asiento y compartir a cena con desconocidos, disfrutando así de un momento más informal.
Llegando a la recta final de Tetuán se encuentra su principal atracción, un brasero vidriado. Detrás de este, también a la vista, se puede apreciar la cocina y un gran horno de barro que es considerado el corazón de las guarniciones.
Su carta merece un capítulo aparte, y es que para crearla fue convocado el reconocido chef Hugo Macchia, quien bajo un meticuloso estudio de las costumbres, sabores y aromas marroquíes, ha logrado deslumbrar con una carta que representa a la perfección los más deliciosos sabores del oriente beréber. Tras el fuego, el chef Ignacio García Lucero hace realidad día a día las recetas de Tetuán con platos que sorprenden.
Cada selección de carne es acompañada por vegetales cocidos al horno de barro, una ensalada fresca, un excelente hummus, una salsa que varía según la opción y pan de pita o fainá, creando así una combinación de aromas, sabores y colores que sorprenderán a sus comensales.
Para aquellos que prefieran no consumir carne se puede optar por el plato de Vegetales, conformado por variedad de vegetales de estación con cous cous con pesto marroquí decorado con salsa alioli, todo realizado dentro del horno de barro. Los vegetales utilizados varían según la oferta del mercado utilizando únicamente los productos más frescos.
La modalidad es de autoservicio y un gran proyector que transmitirá únicamente partidos de futbol o eventos deportivos de importancia, acentúan la idea de combinar amigos y gastronomía en un ambiente informal. (Ravignani 1780)
Desde la fachada del local la cultura marroquí se despliega en sus paredes exteriores con un mural realizado por el artista Cabaio Spirito, donde las formas y los colores se fusionan invitando a adentrarse en una experiencia distinta. Una barra recibe a los visitantes para agasajarlos con diversas opciones de cocktails de autor y 12 variedades de cerveza tirada con Happy Hour todos los días de 18:00 a 20:00hs. Del techo cuelgan un centenar de stencils realizados por Cabaio Spirito inspirado en detalles que recuerdan a la ciudad de Tetuán, de la cual lleva el nombre este moderno gastropub rodeado de paredes tapizadas con retazos de arpillera.
En el centro del salón una gran mesa de madera recorre el largo de Tetuán invitando a grupos numerosos a tomar asiento y compartir a cena con desconocidos, disfrutando así de un momento más informal.
Llegando a la recta final de Tetuán se encuentra su principal atracción, un brasero vidriado. Detrás de este, también a la vista, se puede apreciar la cocina y un gran horno de barro que es considerado el corazón de las guarniciones.
Su carta merece un capítulo aparte, y es que para crearla fue convocado el reconocido chef Hugo Macchia, quien bajo un meticuloso estudio de las costumbres, sabores y aromas marroquíes, ha logrado deslumbrar con una carta que representa a la perfección los más deliciosos sabores del oriente beréber. Tras el fuego, el chef Ignacio García Lucero hace realidad día a día las recetas de Tetuán con platos que sorprenden.
Cada selección de carne es acompañada por vegetales cocidos al horno de barro, una ensalada fresca, un excelente hummus, una salsa que varía según la opción y pan de pita o fainá, creando así una combinación de aromas, sabores y colores que sorprenderán a sus comensales.
Para aquellos que prefieran no consumir carne se puede optar por el plato de Vegetales, conformado por variedad de vegetales de estación con cous cous con pesto marroquí decorado con salsa alioli, todo realizado dentro del horno de barro. Los vegetales utilizados varían según la oferta del mercado utilizando únicamente los productos más frescos.
La modalidad es de autoservicio y un gran proyector que transmitirá únicamente partidos de futbol o eventos deportivos de importancia, acentúan la idea de combinar amigos y gastronomía en un ambiente informal. (Ravignani 1780)
